¿Sabías que el Lifeway KÉFIR es un excelente marinado para carnes? ¡Así es! Las mismas propiedades que le dan a esta bebida su sabor ácido y ligeramente picante también ayudan a que los cortes de carne magra queden súper jugosos y tiernos. Pruébalo hoy con esta receta de pollo marinado con pesto y kéfir, ¡queda delicioso ya sea a la parrilla o al horno!
Ingredientes:
- 1 taza de LifewayKÉFIR natural.
- 450 g (1 lb) de pechugas de pollo sin piel ni hueso.
- ½ taza + ¼ taza de pesto (casero o comprado).
- ½ cucharada de sal.
- 1 cucharadita de pimienta negra.
Instrucciones:
- En un recipiente poco profundo o en una bolsa hermética, mezcla el Lifeway kéfir, ½ taza de pesto, la sal y la pimienta. Revuelve o agita hasta que todo esté bien integrado.
- Agrega las pechugas de pollo y cúbrelas bien con el marinado.
- Refrigera por al menos 2 horas o durante toda la noche (si no usas una bolsa hermética, cúbrelo con plástico adherente).
- Saca el pollo del refrigerador 30-45 minutos antes de cocinarlo para que esté a temperatura ambiente y se cocine de manera uniforme.
Para hornear:
- Precalienta el horno a 230°C (450°F) y engrasa un refractario con spray antiadherente.
- Coloca las pechugas en el refractario y hornea por 20-22 minutos, volteándolas a la mitad del tiempo, hasta que estén completamente cocidas.
- Retira del horno y cubre con el ¼ de taza de pesto restante.
- Sirve de inmediato con tus vegetales asados, ensalada o granos favoritos.
Para asar a la parrilla:
- Precalienta la parrilla a fuego alto (aproximadamente 290°C / 550°F) y engrasa las rejillas con spray antiadherente para parrilla.
- Coloca el pollo en la parrilla y cocina 2-3 minutos por lado, hasta que alcance una temperatura interna de 71°C (160°F).
- Retira del fuego, rebana y cubre con el pesto restante.
- Sirve de inmediato con vegetales a la parrilla o una ensalada fresca.
Notas:
Si las pechugas son muy gruesas, golpéalas con un mazo para carne hasta que tengan un grosor uniforme. Esto ayudará a que se cocinen más rápido y de manera uniforme.
Guarda las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador.
¡Disfruta este pollo jugoso y lleno de sabor con un toque saludable!
